Semana 15

En la semana 15, tu bebé se vuelve más activo y absorbe calcio para fortalecer sus huesos. Da vueltas y patea, aunque el líquido amniótico actúa como amortiguador, por lo que probablemente aún no sientas nada. Si no es tu primer hijo, tal vez notes ya algún movimiento, pero la mayoría de madres primerizas empiezan a sentirlo entre las semanas 18 y 20. Si eres de las afortunadas que lo sienten antes, ¡qué emoción! Si no, no te preocupes, pronto llegará el momento.

Al final de la semana 15, tu bebé tendrá el tamaño de un aguacate. 🥑

Preparando el equipo

Aunque aún es temprano en el embarazo, no está de más pensar en el equipo que necesitarás cuando nazca el bebé e investigar un poco el mercado. Uno de los elementos más importantes y costosos es el carrito. Aunque el bebé estará bien en colchas y cojines, el carrito es esencial para ti.

Aquí tienes algunas recomendaciones:

• ¿Vives en una zona rural y caminas por caminos de grava o bosque? Un carrito con ruedas duraderas será ideal.
• ¿Vives en una ciudad concurrida? Quizás te convenga un modelo pequeño y fácil de maniobrar en aceras llenas o en el transporte público.
• Tipos de ruedas: Las ruedas fijas son mejores para terrenos difíciles, mientras que las giratorias facilitan el manejo. Algunos modelos permiten bloquear las ruedas giratorias para fijarlas.
• ¿Qué tipo de coche tienes? Es importante elegir un carrito que quepa en el maletero.

Pensar en estos aspectos te ayudará a elegir el carrito ideal para tu estilo de vida y necesidades.

No olvides mimarte

Durante el embarazo, ¡recuerda que estás creando una vida y mereces cuidarte! Aunque no se recomiendan los baños muy calientes ni las saunas, hay muchas otras maneras de darte un gusto, y mimarse puede significar algo distinto para cada persona.

Disfruta de pequeños placeres cotidianos: tómate una siesta, pide comida a domicilio, siéntate con los pies en alto unos minutos o contrata a alguien que te ayude con la limpieza (¡pronto te costará más moverte!).

Una manicura o pedicura también es bienvenida; tus pies y piernas te lo agradecerán, ya que pronto soportarán más peso. Puedes disfrutar de un masaje o tratamiento facial, solo recuerda informar que estás embarazada para que adapten el servicio.